La Tercera vez
Lo has conseguido,si lo que querías es que nadie dependiera de Ti
lo has conseguido, otra vez.
Yo ya no dependo de ti.
Ayer, mientras limpiaba encontré tu pendiente.
Aquel que perdiste, una noche.
Estaba encima del rodapié, por eso no lo encontrábamos.
Puedes pasarte a recogerlo cuando tu quieras.
Pero esta vez no me dejes nada a cambio.
Ya tengo demasiados recuerdos,
son demasiados años,
demasiadas veces,
demasiados...
R.S
Escrito por Rodrigo at 2:18 a. m.
6 Comments:
Quizá tú no lo sepas, pero yo, que soy experta en perder cosas y que tengo cien mil pares de pendientes desparejos, sé que los pendientes, luego aparecen en los sitios menos esperados, como un rodapié. Con los sentimientos pasa lo mismo, te los encuentras cuando menos te lo esperas, y donde menos te lo esperas. El problema, es que, aunque queramos creerlo, nunca llegan a cubrir el cupo, y nunca llegan a esa rayita que hay en los medidores donde pone "demasiados". Bueno, quizá no sea un problema, quizá sea "buena suerte".
... estaba tendiendo la ropa y me acabo de dar cuenta de que no sólo pasa con los pendientes y con los sentimientos, también con los calcetines.
no entiendes nada de poesía rodrigo.
esto es lo mejor que has escrito nunca; no tiene palabras ni ideas rebuscadas o trasnochadas. parte de algo sencillo y desencadena una serie de recuerdos y reflexiones.
está en la línea de Luis Garcia Montero,Luis Alberto de Cuenca,Luis Felipe Comendador,Berna Wang, etc.
¿y dices que no es poesia???
no entiendes nada de poesía rodrigo.
esto es lo mejor que has escrito nunca; no tiene palabras ni ideas rebuscadas o trasnochadas. parte de algo sencillo y desencadena una serie de recuerdos y reflexiones.
está en la línea de Luis Garcia Montero,Luis Alberto de Cuenca,Luis Felipe Comendador,Berna Wang, etc.
¿y dices que no es poesia???
Luis Rodrigo san juan... no suena del todo mal
Para Mi Niño,
¿Cómo quieres que me pase a recogerlo sin dejar nada a cambio? Yo dejo lo que tu quieres coger, siempre ha dependido de tí.
Ojalá sea verdad eso que dices de que ya no dependes de mí, así quizá algún día podamos decirnos las cosas a la cara.
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